Los inicios del Cannabis empezaron en Oriente:
Podemos encontrar documentos sobre su uso desde el año 2900 AC. La primera referencia es del emperador chino, Fu Hsi, el emperador que trajo la civilización a China. La Medicina Tradicional China (MTC) considera el cuerpo como una versión pequeña del universo que lo rodea y su objetivo es ayudar a las personas a alcanzar un estado de armonía entre las fuerzas opuestas del Yin y el Yang. Según un antiguo libro de medicina del famoso emperador y herbalista Shennong, el cannabis tiene varias propiedades importantes, pero además de eso dice Shennong que el cannabis beneficia a las “5 vísceras” (el corazón, el hígado, los pulmones, los riñones y el bajo-páncreas). La MTC considera que el cannabis posee la energía del Yin y el Yang a la vez, por poseer las dos a la vez es una perfecta herramienta para alcanzar la homeostasis, el equilibrio físico y mental.
Mientras tanto en occidente:
En occidente, la medicina holística como la naturopatía o el herbalismo, fueron apartadas de la sociedad casi por completo. Este tipo de medicina que tiene origen en las antiguas civilizaciones como Grecia y Egipto también tenía como objetivo conseguir el bienestar y equilibrio físico. Pese a que no existen muchos registros del uso de la planta de cannabis en la medicina occidental antigua, si se sabe que se empleaba frecuentemente para el dolor y como anestesia. Hoy en día la medicina holística y el interés por la salud preventiva está volviendo a crecer.
Una historia polémica
Los primeros estudios científicos sobre la planta de cannabis se iniciaron a finales de siglo XIX. Podemos encontrar registro de más de 2000 medicinas diferentes con cannabis producidas por más de 280 compañías antes de 1937. Poco después, la sociedad occidental inició sus campañas de prohibición y muchos políticos y empresarios calificaron su uso como dañino, llegando a situarlo como algo más perjudicial para la salud que otras sustancias como el alcohol. Esta situación persigue la planta hasta hoy en día.
En los años sesenta del siglo XX investigadores aislaron el CBD y el THC para estudiar sus efectos beneficiosos para la salud general y para tratamientos de enfermedades y sus síntomas. Solo llevamos 50 años analizando esta mágica planta con el microscopio, sin embargo, el estudio sobre el cannabis sativa nos ha ayudado a entender el sistema endocannabinoide (ECS) del cuerpo y a utilizar este conocimiento para mejorar la vida de las personas.
